En lo que se puede llamar como la segunda revolución industrial, en la década de 1800, se puede comenzar a ver una rápida aceleración del movimiento feminista, producto de todas las luchas anteriores en diversos países del viejo mundo, generando así pequeños cambios que lentamente comenzarán a expandirse a los demás países, derivando así en la participación de las mujeres en la vida política, social y cultural.
En Gran Bretaña, a principios del siglo XX las mujeres solteras que tenían entre 20 y 45 años logran tener un trabajo remunerado. Otro factor importante será el rol de la mujer y su concepción de vida, puesto que comenzará a disminuir la idea de matrimonio; se comienza a observar una población de mujeres solteras con más de 45 años. Y esto no solo se puede explicar sólo como una opción de liberación del maltrato que se puede apreciar bastante en esta época, por ser el homnre una figura de respeto y de poder, sino que también la opción de permanecer solteras puede verse reflejado en el ámbito económico.
Ahora bien debemos mencionar como un hecho importante a la primera guerra mundial; puesto que esta estará dada por una incersión de la mujer en los diversos trabajos, producto de la salida del hombre hacia el frente de batalla, por lo que la mujer comenzará a desarrollar las labores que anteriormente le correpondía al hombre. Esto hará dar cuenta a la diversas mujeres sobre su conciencia social y el valor que estas pueden entregar a la sociedad.
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